La suciedad y el absoluto abandono sigue campando a sus anchas en las zonas más periféricas de Benalmádena. Un paseo por la zona norte de la autovía, aquella que Enrique Bolín no tuvo reparo de llenar de enormes promociones inmobiliarias sin preocuparse por garantizar los servicios mínimos, evidencia que al actual equipo de gobierno le importa más bien poco mantener el vecindario mínimamente presentable.
Como puede observarse en la imagen adjunta, junto a una rotonda ocupada por una de las pilonas del teleférico se acumula un vertedero en toda regla. Fin de semana tras fin de semana no paraba de acumularse en este punto la basura, debido a que un grupo numeroso de jóvenes había escogido este enclave para reunirse y practicar
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